QUÉ VER EN COPENHAGUE - Viajar por libre

¿Qué ver en Copenhague? Pese a dar una falsa sensación de ciudad pequeña, tiene mucho que ofrecer y verlo en dos jornadas es un imposible si nos ceñimos en querer abarcar los puntos más imprescindibles.

Es fundamental que sepamos cuándo ir, porque en invierno apenas dispondremos de 9 horas de luz natural, mientras que, en verano, los días se llegan a prolongar hasta casi 15 horas. Pero seamos cautos y hagamos conciencia que muchos museos, tiendas, mercados y lugares de interés, cierran pronto, muy pronto. Las tiendas, a las 18 h van bajando persianas, mientras que los museos, a las 16 h, ya no admiten más visitas. Es ahí donde debemos aprovechar y callejear para estirar lo máximo posible la jornada y acabar conociendo a la capital danesa como se merece.

Si a esto le añadimos que los daneses son amantes de la vida nocturna, la buena música y el buen beber, nos veremos envueltos en un ambiente en ancestrales tabernas riendo entre vinos calientes, buenas cervezas de barril y esa divertida cara oculta que de día no muestran.

Copenhague no pretende ser nada, sinceramente la historia ha sido injusta con ella quedando hecha añicos entre históricos incendios que redujeron varias veces la ciudad a cenizas y que ha sabido levantarse una y otra vez para reinventarse, viendo en la actualidad una urbe moderna, limpia y con esos tintes nórdicos inconfundibles entre clásicos aunque nuevos edificios, fusionando barrios tan distintos pero tan unidos geográficamente, que no sólo lo convierten en una capital joven y jovial, sino que muy sencilla de recorrer y disfrutar a pie.

¿CUÁNTOS DÍAS LE DEDICAMOS?

Para ser más exactos, diría que tres jornadas en la capital, apurando muchísimo el tiempo, sin descansos, estaría bien. En cuatro días sí que podríamos decir, que todo quedaría visto, aunque descubrir los secretos de la ciudad, requieren más tiempo.

Seamos sensatos y no calculemos las jornadas igual en verano que en invierno. Como he comentado al principio y recalco, en invierno los días son muy cortos, poniéndose el Sol a las 15:45 h pudiendo sólo abarcar apenas 9 horas de luz, mientras que el verano se alarga muchísimo, teniendo hasta 15 horas de Sol. Son datos importantes, muy relevantes, ya que mientras en pleno invierno deberemos dedicar más días, en verano disfrutar de la Capital incluso del país, es más llevadero y flexible.

UNA BUENA TOMA DE CONTACTO

Ni tengo comisiones con ellos ni tengo nada que ver con la compañía. Pero una gran idea que he realizado durante mis viajes sobre todo por Europa es dedicar la primera jornada a contratar online, en Civitatis o Getyourguide un Free Tour por la ciudad, que no sólo sirve de antesala a lo que hagamos posteriormente, sino que te orienta, y te aconseja lo que deberías ver con más calma y lugares que ni siquiera salen en las guías.

Las personas que dirigen estos Free Tour, suelen ser españoles que viven en el país por un tiempo definido y se informan muy bien sobre todas las curiosidades que ofrece cualquier lugar que visitemos. Como todo en esta vida, hay alguno que sale rana, pero en todas mis visitas sólo tuve que lidiar con un payaso en Viena, que lo único que hizo, delante de un buen grupo de turistas, fue criticar mi Barcelona.

Puede parecer algo demasiado típico, que no veamos que sea una experiencia creada por nosotros al viajar por libre, pero mi experiencia con ellos en general, ha sido muy instructiva y todos los visitantes, son viajeros que por poco dinero (la voluntad), hacen que estas excursiones urbanas, se hayan ganado tanta buena fama por todo el planeta.

Otro consejo que puedo dar es adquirir un mapa en la oficina de turismo y que os guíen un poco qué ver e informar de cuántos días disponéis. Esto más bien que un consejo, es casi de carácter obligatorio en cualquier ciudad antes de conocerla.

Yo siempre consigo información por internet y llamadme anticuado, pero mi Lonely Planet, no puede faltar en mi mochila.

LOS 12 IMPRESCINDIBLES DE COPENHAGUE

No nos engañemos y nos ciñamos a lo más típico. Hay secretos en la ciudad bien guardados y no todos pasando por caja. En los siguientes imprescindibles elegidos personalmente, son los que a mi entender no pueden faltar si decidimos ir un par de días o incluso tres para ir más desahogados y poder también aprovechar un poco le buena cerveza danesa.

El orden es muy subjetivo y no lo he ordenado de mejor a peor porque me parece que aquí entra la percepción de cada viajero, y soy muy consciente que aunque lo escrito pueda ser lo más típico, no es lo que ponen otros blogueros como estuve consultando antes de ir.

1 – LA SIRENITA Y KASTELLET

Kastellet es una construcción con fines defensivos militares, iniciada en 1626, para proteger las murallas de la ciudad. Actualmente sigue ejerciendo una actividad militar, pero es un bonito paseo con preciosas zonas verdes y un perfecto camino hacia la famosa Sirenita. No hay que pagar entrada.

La Sirenita, es el símbolo de la capital. Todas las ciudades incomprensiblemente tienen monumentos que arrastran mucha historia, pero si en Bruselas el Manneken Piss ya servía una buena decepción, La Sirenita deja con menos gusto de esperado. Su apenas metro de altura y sus 180 kilos en puro bronce, hacen que este personaje acabe situándose en el lugar número 1 de todos los imprescindibles de Copenhague. Evidentemente a modo personal discrepo, pero parece que a los visitantes les atrae la idea de este personaje inspirado en uno de los cuentos del genial Hans Christian Andersen.

Posada en una roca, será difícil conseguir una foto a solas, y sacar algo decente con el móvil o la cámara será complicado ya que está en plena orilla del Mar, afeada por los muelles industriales con sus enormes grúas como telón de fondo.

Destacar que de camino, sin entrar en Kastellet, y dirigiendo los pasos a la Sirenita, podemos ver la preciosa Fuente de Gefion, situada en el bonito parque de Langelinie.

2 – PALACIO DE AMALIENBORG

No sólo se trata del palacio que sirve como residencia de invierno para la realeza danesa, sino que es para mi gusto uno de los mejores lugares de la capital y viene de camino para ir a ver la Sirenita y Kastellet.

Cuatro edificios de estilo rococó forman una preciosa plaza con una estatua del Rey Frederick V. Es un lugar perfecto para pasearse y leer acerca de la realeza danesa, ya que cada edificio es de un miembro de la familia real.

La monarquía en Dinamarca no sólo está bien vista, sino que los daneses están orgullosos y son fieles seguidores de la reina Margarita, dejando según la época que toque, los favoritismos hacia los posibles herederos, como comidilla a la prensa rosa.

Una buena hora para ir, son las 12 de la mañana donde podremos ver los cambios de guardia.

Entrar al Palacio de Amalienborg está incluido en la Copenhague Card y el horario es de martes a domingo de 11 h a 16 h

Por si fuera poco, a escasos metros, tenemos a simple vista la Iglesia de Mármol (entrada gratuita), bien visible con su gran cúpula copiada de la Gran Basílica de San Pedro del Vaticano.

3- NYHAVN

Típica postal de la capital con bonitas y coloreadas casas que dan a un precioso canal que servía antiguamente de entrada marítima comercial.

Nyhavn o Puerto Nuevo, es un lugar que se construyó en el siglo XVII, y lo que hoy vemos, nada tiene que ver con lo que era antes, ya que los marineros lo utilizaban para satisfacer las carencias de tantos meses en alta mar, llenando los burdeles a todas horas.

De hecho, se cree, que eran tan monumentales las borracheras que pillaban, que nunca se acordaban dónde se hospedaban, dando la idea a los propietarios de pintar de diferentes colores sus fachadas. Más fácil recordar el color de un edificio que la entrada. Una lógica aplicada que es simple y efectiva.

En Canal de Nyhavn, hay que pasearlo de día y de noche. Sus preciosos restaurantes, de precios muy elevados, puede que nos echen hacia atrás, pero el ambiente, los puestecitos callejeros y su vibrante vida llena de visitantes, hacen de este rincón, el más conocido de Dinamarca.

Otra actividad que no puede faltar a parte de pasear, es la de coger un barco y recorrer los canales. Mi consejo es que lo hagamos en la compañía Neto, que nos costará 50 Coronas haciendo el mismo trayecto que los más populares y mejor ubicados, pero que nos soplarán 150 Coronas, por el mismo recorrido y duración. Neto está en el lado opuesto de las fachadas coloreadas y aunque su embarcadero es pequeño, es bien visible.

4 – CHRISTIANIA

Según los daneses, dicen que el barrio de Christiania o lo odias o lo amas…. No lo entiendo. ¿Quién va a odiar un barrio como éste?

Entrar en Chistiania es entrar en otro mundo. Sí, me podéis decir que exagero, pero si no habéis estado es que no tenéis ni idea de lo que hablo. De hecho, en la salida su cartel muestra la frase de “Usted está entrando en Europa”.

Es curioso como un barrio en 1971, unos padres se instalaron allí, para que sus hijos tuvieran espacio y poder jugar se acabó convirtiendo en un movimiento político social, donde se puede decir que todo estaba permitido, creando una comuna hippie, que en la actualidad tiene una población de mil personas

Su afán por conseguir un edén en el pasado, oculto a la vista de la sociedad danesa, no es que les haya solamente pasado factura, sino que acabaron irónicamente siendo devorados por la curiosidad de la gente, creando una atracción turística, en la que según mi opinión, sus fundadores originales, no estarían del todo contentos.

Pero vayamos por partes. ¿Qué ocurre en Christiania? ¿Es peligroso? ¿Es cierto que venden drogas?

Lo que ocurre en Christiania y lo que la hace tan interesante es la originalidad de su arquitectura y la originalidad que han empeñado en crear unas calles llenas de casitas, esculturas y preciosos parques con materiales reciclados, pudiendo encontrar un parque dedicado al budismo y otro al sintoísmo de una manera tan original como sorprendente.

Las galerías de arte, por así llamarlas, están en locales que parecen ancestrales edificios de madera, pero es una muy buena manera de adquirir pequeñas obras de arte artesanales, fotografías y pinturas, donde el mismo autor te la vende y te la firma.

Un edificio que no debemos pasar por alto es el Den Grá Hal, llamado Salón Gris. Es el centro cultural más importante de toda la comuna, donde entre grafitis, podremos ver si vamos en navidad, los curiosos puestos. Las largas colas, pueden desalentar, pero es un punto muy reconocido turísticamente donde además suelen hacer conciertos de talla mundial.

¿Es peligroso entonces? No. El barrio no muerde la mano que le da de comer. Puede que a los más desinformados pueda causarle alguna duda y si decimos que hay que ir de día, no es por sus peligros, sino porque con luz natural, se disfruta de su calle principal Pusher Street y dejarse perder sin miedo por el resto de sus calles y parques resulta muy gratificante.

¿Es cierto que venden drogas?

Las drogas blandas no tienen cabida en el sistema legal danés, por lo que la policía deja este pequeño pueblo como fiel reflejo de crear un gueto “legal” controlado donde venderlas como ocurre en muchas ciudades del mundo. Recordemos que el ilegal y que comprarlas puede traernos problemas, pero en el país libre de Christiania podemos afirmar que no tendremos ningún problema, aunque la posesión es otro cantar, creando ciertas dudas a los consumidores.

Consejo a seguir: Está terminantemente prohibido hacer fotografías donde los camellos venden y exhiben sus productos desde pequeñas casetas de madera a cajas de cartón improvisadas en medio de la calle. Si os pillan, os seguirán y os harán borrar la foto. Cuidado, porque los vendedores pueden verse afectados al poder considerar que una instantánea puede formar parte de la prueba de un delito en caso de que haya problemas.

¿Cómo llegar?

Situado en el barrio Christianshavn, llegar desde Nyhavn, es sencillo caminando. Si nos pilla lejos, la parada de metro con el mismo nombre nos deja en pleno corazón del barrio y a poco menos de diez minutos caminado a la comuna de Christiania.

La zona es bonita. Rodeada de canales y varios edificios históricos, hacen de esta zona una buena alternativa a lo típico de la capital si previamente hemos visitado los puntos más interesantes del centro. A destacar Vor Frelsers Kirke , que es la iglesia con la torre redonda en espiral, muy visible desde diversos puntos de la ciudad. La torre tiene 400 escalones y ofrece unas vistas sorprendentes. La visita es de pago, unas 50 coronas, pero está incluida en la entrada de la Copenhague Card.

5 – JARDINES DE TIVOLI

Quien venga a Copenhague y pase por alto este parque de atracciones, estará cometiendo un gran error.

El segundo parque de atracciones más antiguo del mundo, construido en 1843, fusiona muy bien esa mezcla entre lo antiguo y lo moderno.

Sus pabellones donde acogen conciertos, sus atracciones, desde las más antiguas como la famosa montaña rusa hasta las más modernas, hacen que aburrirse aquí sea imposible.

Cuatro millones de visitantes no pueden equivocarse y este emblemático lugar, situado en pleno corazón de Copenhague, dando una falsa sensación cuando recorremos su perímetro por fuera, intuyendo erróneamente que es pequeño, pero una vez dentro, veremos que cada metro cuadrado está aprovechado al máximo.

Las entradas se pueden adquirir en las mismas taquillas de las dos entradas que el parque tiene. Si vamos desahogados de tiempo y podemos ir entre semana, comprarla en la taquilla, no supone un drama, pero si vamos en Navidad o en festivos, deberíamos plantearnos comprarla online.

Hay que tener en cuenta que hay varios precios según lo que queramos hacer. Si sólo queremos ver los jardines y pasear tranquilamente, el precio pese a no ser barato es muy asumible. Sin embargo, si queremos subir a las atracciones, hay que añadirle otro bono independiente, incrementando de manera desorbitaba el precio final.

Precios Parque Tivoli:

-Incluido en la Copenhague Card (entrada a los jardines)

-Entrada a los Jardines de Tivoli: 21€

-Entrada a los jardines y pase a las atracciones: 59€

Déjate de intermediarios y sigue este enlace oficial para obtener tus pases online, sin colas y con la garantía oficial de su web oficial.

Debemos saber:

-Los jardines de Tivoli, están abiertos desde abril hasta septiembre y del 31 de octubre al 31 de diciembre. Entre enero y Abril está cerrado.

-Vivir la Navidad en el Parque de Tivoli es darle otra dimensión a la ciudad. Mientras que el verano nos regala conciertos y fuegos artificiales todos los fines de semana, la Navidad y sus mercados no sólo sobredimensionan la ciudad, sino que el parque viste sus mejores galas, iluminando hasta la exageración todos sus rincones y pasear bajo un mar de luces en la noche danesa, resulta evocador y muy romántico. Ir con tu pareja, es hacer esta parte del viaje en algo para no olvidar.

-El truco para poder verlo con calma y sin mucha gente, es ir antes del fin de semana. La entrada podemos comprarla presencialmente

¿Cómo llegar?

Pegado a la estación central de trenes, es muy fácil encontrarlo si nos hospedamos en el centro e ir caminando es una opción muy recomendable.

Para lo que hayan escogido dormir en lugares más lejanos, deberán bajar en tren en La Estación Central de Copenhague, conocida también como Kobenhavn H.

6 – CALLE STROGET

Es una delicia poder pasear por la calle peatonal más larga de Europa según las guías de viajes 1.100 metros), que va desde Radhuspladsen hasta Kongens Nytorv, atravesando todo el casco antiguo y dando a los visitantes más impulsivos económicamente, alas y dejarse todo lo que quieran en las tiendas más caras del planeta. Pero no nos asustemos, también hay negocios para los bolsillos menos holgados y pasear, descubrir y perderse por sus calles adyacentes, atravesar sus bonitas e históricas callejuelas que irán saliendo a nuestro paso mientras absorbemos sensaciones por la arteria principal de la capital, sobredimensiona este imprescindible de Copenhague hasta límites sorprendentes.

No debemos pasar por alto la tienda Lego, toda una visita obligada y gratuita o quedarse merodeando por las plazas que iremos cruzándonos, donde la vida hierbe, la juventud celebra sus graduaciones y donde los músicos callejeros crean una atmósfera ideal para engatusar incluso al viajero más indiferente.

Lugares como el Barrio Latino o las cervecerías medio escondidas donde desinhibirnos después de una larga jornada de caminatas o dar un vistazo a la aparentemente sosa Catedral de la capital, son sólo añadidos que no deberemos apuntarnos, sino más bien iremos encontrando si le dedicamos el tiempo que bien se merece Stroget.

Un consejo que os daría sería antes de empezar o al acabar, dependiendo de donde partamos, es visitar el ayuntamiento en la Plaza del Ayuntamiento. Este precioso edificio es una auténtica maravilla por dentro y las bodas irán desfilando delante nuestro. La visita es gratuita y nadie te va a decir nada cuando abras la puerta principal y asomes tus narices para averiguar qué que cuece allí dentro.

Si los datos no me fallan, unas 125.000 personas circulan diariamente por Stoget. Creo que el fin de semana, la cifra se dispara aún mucho más. Doy fe.

Puede que ni siquiera hubiera puesto en el puesto 6 este lugar de imprescindibles, no porque no lo merezca, sino porque tarde o temprano deberemos caminar por ella para ir a todos los puntos que os he puesto en este artículo, pero si somos objetivos, no poner a Stroget en la lista, sería de una injusticia total.

7- PALACIO DE CHRISTIANBORG

Situado en la pequeña Isla de Slotsholmen, encontramos la sede del Gobierno Danés y no sólo el Palacio en sí es un aliciente, sino que toda la zona es muy bonita y tranquila.

La entrada a muchos lugares de este palacio de 800 años de antigüedad está abierta al público, aunque son de pago (21,50€).

Podemos visitar Las ruinas del palacio, Las estancias reales y las Caballerizas. Si podemos prescindir de entrar porque queremos basar nuestras preferencias en otros lugares de la ciudad no debemos pasar por alto el siguiente “Súper consejo”.

Súperconsejo:

Mirador de la torre de Chistianborg, no es sólo considerado el mejor mirador de la ciudad, sino que además ¡Es Gratuito! Fácilmente localizable y con ascensores que van empalmando, pasaremos un control de seguridad a modo aeropuerto, y pese a que podamos encontrar algunas aglomeraciones, la cosa fluye y no perderemos mucho tiempo en coronar por etapas, dos subidas en ascensor y una por escaleras a la torre más alta de Copenhague.

8- MALMÖ

Excelente opción fuera de todo circuito, pero una idea fantástica si vamos más días de los necesarios. Malmö no es que sea la panacea de las ciudades europeas. De hecho, como seguidor de pádel, sólo conocía esta encantador lugar debido a los torneos mundiales que se transmite por televisión anualmente en el circuito de World Padel Tour. Pero si somos curiosos, lanzarse a Suecia, sólo el cambio de país, cruzar una nueva frontera, movernos con otra moneda y todo lo que implica psicológicamente para los viajeros, Malmö es una excelente opción.

Destacar su bonito casco antiguo y dejarnos llevar por sus preciosas plazas llenas de restaurantes.

Mencionar que muchos viajeros, deciden hospedarse en Malmö y utilizarlo de base porque es mucho más económico pernoctar allí y si tenemos la Copenhague Card, ir y venir a Dinamarca en tren es gratuito.

Si queremos ir, lo tenemos bien fácil, accediendo desde Copenhague a Malmö, apenas hay a 48 kilómetros o traducido en tiempo, a unos 45 minutos en tren o 1 hora en autobús desde la Estación Central de Copenhague, conocida cono Kobenhavn H. hasta la Malmö Station.

Precio del billete ida y vuelta en tren 24€.

Precio del billete ida y vuelta en autobús: 20€.

**OJO** : Hay que llevarse el DNI o pasaporte aunque a nosotros no nos paró nadie en aduana, ni tan siquiera nos pidieron los carísimos billetes-.

BONUS:

Por supuesto hay muchos lugares que me han encantado. Pero una vez he conocido la ciudad, quedarían en un segundo plano, sólo si me faltara tiempo. Hay que tener en consideración:

9-Mercado de Torvehallerne: De comida va la cosa y en el bonito barrio de Norreport, que destaca por sus amplias avenidas, sus enormes restarurantes y unos modernos bares para tomarnos una buena pinta. El mercado culinario de Torvehallerne se compone de dos pabellones de cristal, donde dar rienda suelta a nuestros paladares y conocer un poco lo que se vende. Es un excelente lugar para comprar productos típicos y de muy buena calidad.

10-Castillo de Rosengborg: Puede que sea una de las estampas más típicas de la capital. El precioso castillo de un tamaño contenido, si bien la visita puede ser prescindible, sus jardines son una perfecta válvula de escape, que durante las estaciones más calurosas se llena de capitalinos para hacer su picnic.

11-Ópera de Copenhague: Conflictivo edificio con tintes modernistas y pagado por la colosal empresa de contenedores Maersk. Su apariencia contrasta con la opinión pública, pero a mí me gustó. Además, es impresionante en el entorno que está y el enorme edificio es muy fotogénico.

12-Museo Nacional de Dinamarca: Imprescindible para introducirnos en la historia de Dinamarca remontándonos a varios milenios. Podemos ver como la cultura vikinga estuvo muy presente y sus colecciones son muy interesantes.

CONCLUSIONES FINALES.

Pendiente desde hacía varios años y temida por el frío invernal, me apetecía ir en Navidad. Pensaba que las temperaturas respetarían mi tolerancia y la verdad que el clima es muy caprichoso y si he tenido la suerte de disfrutar de un espléndido Sol, eso conlleva a que las temperaturas bajen y llegar a los 8 bajo cero, acaban siendo un lastre cuando anochece.

Pero no todo fueron malas jugadas climatológicas, ya que una noche, mientras dormía, nevó, pudiendo disfrutar de una Copenhague blanca, llena de luces y mercados navideños, lo que significó que mi experiencia durante mis cuatro días fuera mucho más gratificante.

No os lo penséis y sea verano o invierno, la capital danesa es bonita, fácil y muy accesible. ¿Los precios? todo es ponerse a mirar cómo abaratar y si en el alojamiento poco podremos hacer si nuestra intención es alojarnos en pleno corazón, en otros aspectos e hilando fino, al final lo que nos hemos gastado, ha resultado ser mucho menos de lo que llevábamos planificado.

Adelante que Copenhague te espera. Ni lo dudes…

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